Pablo, de “toros” na… déjalo en “vaques de pata blanda” ,
Efectivamente el pateo no fue corto, pero el buen día de sol y el placer de pisar la nieve virgen nos dió combustible para aguantar la xatá. Lo de meténos por la Llampa Maloa fue un antojo de esos días en que uno no está para grandes rutas. Ye un canalón muy coqueto que tien una salida por arriba muy guapa.
En otra ocasión también ficimos un canalón que sube a la misma cima del Cantu LLimpou. Subimos desde Justillagar unos 250 m, desnivel. Un bonito canalón parecido al de LLampa Mala.
Ricardo, no encontramos a nadie. También es verdad que fue un jueves y si esa zona de fin de semana ya ye solitaria, en un día laboral más todavía. Este viernes anduvimos por la zona del Refugio de Vegarredonda y aunque parezca una tontería no ye lo mismo caminar por un “patatal” lleno de huellas que ver ese paisaje blanco inmaculado.
¡Hombre,
Pucavi! ¡Cuánto tiempo! Seguimos… con alguna que otra interrupción, pero lo importante es no parar. Tú si que estarás a tope con tus carreras. Se te echa de menos por aquí.
Elisa, gracias. Nos tratas demasiado bien
. Precioso ejemplo el de la Matrioska para describir las sensaciones que nos producen los picos. Es un mundo laberíntico que no encontramos en otras montañas aunque éstas sean más altas o más famosas.
Estaba todo precioso
Frajam. La verdad es que a pesar de que este invierno la nieve se hizo esperar, en esta vertiente de Picos hay por doquier… y con la que está cayendo ahora suponemos que “el caramelo” nos durará más.
Pineda, este año por ahora os vais escapando de la nieve, pero no creáis, que todavía estamos a tiempo de compartir una buena ruta de nieve, de esas en las que acaba uno enterándose que tiene cadera
Cienfuegos, también nosotros anduvimos por esos andurriales en verano. Y el recuerdo del caos, el calor y el pedregal que hay por esa zona, hacen que valoremos más hacer esta ruta con nieve. Eso sí, mejor que la nieve esté dura, porque si está demasiado ahuecada, aquí encontramos terreno “comanche”
Helio, compañero, pues no te queda ná. Todavía vas a tener tiempo de cargar con todo el material de invierno. Ya sabemos que por esta época te entra hambre de verano, pero como tú dices, no te vas a librar de nosotros… ni de la nieve, tan pronto
¡Saludos y gracias por responder!
Yo deseando guardar los pesados trastos invernales 
y vosotros, erre que erre, aprovechando cualquier resquicio blanco 
