Foros de Montaña de Picos de Europa y Cordillera Cantábrica

TOPÓNIMOS DE BELBÍN El 12 y 13 de julio de 2003 el inolvidable pastor de Belbín José González Alonso, natural y vecino de Camonéu d’Onís (Onís), de 75 años entonces y ya fallecido, me dijo estos nombres de sitios del Puertu Onís y del Puertu Cangas, localizados más que nada en esa vega de Belbín (la...

¡Gracias! Cuando pasé por allí, que la última vez fue hace ya unos cuantos años, sí me parecieron llamativos. Fotografía del Jue los Coches creo que no tengo pero la hondonada sigue estando allí arriba y cualquiera puede acudir a ella a corroborar mi teoría... o a proponer otra, que así es como se a...

En Bulnes se llama cochos o gochos a los cerdos; caminan muy despacio y creo que del pueblo a Amuesa tardaban un día entero en llegar, por lo que a hondonada tan alta y apartada como el Jue los Coches no los llevarían. Pero sí sería posible una analogía de la voz boches, ya probablemente perdido en ...

BILBAO, PAMBUCHES, EL JUE LOS BROCHES Hace unos días visité Bilbao, la gran ciudad del Norte. Como se suele destacar lo que más le interesa a cada uno, a mí me llamó la atención el asunto toponímico. En otros territorios de la Cornisa Cantábrica se puede suponer la raíz *B-LB-, *B-RB- para concentra...

TOPÓNIMOS CANGUESES Que me fueron dichos el 3 de agosto de 1999 por Miguel Díaz Casero, del pueblo de Ñeda, y se localizan en la parte occidental del Puertu Cangues, en parajes con un relieve abrupto en exceso, aunque, y es que siempre nos espera algo mayor a la vuelta de la esquina, menos del que a...

¡Gracias!, la información sobre el Morrascu la Tabla me fue dada, el 23 de agosto de 1992, en el mismo lugar por el pastor de Camaleño Tomás Puente González, ya fallecido y que fue el principal suministrador de topónimos para el libro.
Ramón

El Album de la Juventud, famoso porque en él aparecieron los primeros trabajos sobre mitología asturiana, poco rigurosos y obra de Tomás Cipriano Agüero, estuvo perdido durante muchos años, véase Mitología y brujería en Asturias, Ramón Baragaño, Gijón, 1983, página 13. Por eso mi sorpresa fue grande...